El pasado 31 de enero asistí al cumpleaños, que se celebró en el El Palauet, del bailaor de flamenco y amigo mío Rafael Amargo. Cumplió 40 años el 3 de enero pero su gran fiesta se hizo de esperar y, a decir verdad, valió la pena.
Conectados
Os tengo que decir un secreto, cuando Rafa me invitó, tuve miedo a no estar a la altura de las circunstancias, a pesar de nuestra relación tan singular. Os contaré que mi amistad con Amargo se basa en los silencios y en las lecturas invisibles de los pensamientos. Para explicarlo más claro: muchas veces sé si está bien o mal sin tener contacto. Pero claro, ir a un cumpleaños de ámbito social era distinto. ¡Pero fue diferente a todo lo que me imaginaba!
¡Fue una noche inolvidable! Excelente comida, música variada, personas de distintos ámbitos y una atmósfera inconfundible de Amoramargo.
Personas especiales
Lo que me gustaría subrayar de la fiesta es la excepcional compañía de la cual disfruté.
Borja Mercader y Chelo Hernández, mis acompañantes, me hicieron reír y fue un placer compartir con ellos una noche llena de alegría y amor.
El top model y sportsman Jordi Gil Fernández y el fotógrafo y deportista Jordi Muñoz me cuidaron y mimaron toda la noche. Estos dos hombres irradian ternura y bondad; creo que tardaré dos vidas en devolverles el cariño y la ternura que me regalaron en sólo cuatro horas.
También tuve la suerte de conocer a Sergi Lacorte, socio de la revista Eye2magazine, el cual me pareció una excelente persona.
Quiero agradecerle a Rafael Amargo toda la atención y amor que tiene conmigo y a Sol Picossi por ser tan especial.
